viernes, 6 de noviembre de 2015

Inmediatez

"El 80 por ciento del éxito 
consiste en estar allí"

Woody Allen

Los tibetanos creen en la existencia de un reino sagrado, Shambhala, oculto en algún rindón remoto del Himalaya. En este lugar paradisíaco impera la belleza y la bondad, porque sus pobladores han alcanzado la iluminación trascendiendo el sufrimiento. Muchos consideran que aún es posible llegar a Shambhala, pero el camino es largo y está lleno de peligros. Quien tiene la suerte de llegar a sus puertas -a menudo fruto del azar- debe aprovechar la oportunidad de penetrar en el reino. Si no lo hace y lo posterga para más adelante, tal vez nunca más vuelva a encontrarlo. Las puertas de Shambhala se abren una sola vez en la vida, y el que no las atraviesa queda fuera para siempre.

Imagen de la página The Sacred Heart of Shambhala
Este mito nos enseña algo muy importante que a menudo olvidamos: la vida no espera; por lo tanto, si tenemos un sueño, debemos tratar de hacerlo realidad. Si no tomamos la iniciativa con el primer entusiasmo, ya nunca vamos a hacerlo.

Es triste dejar pasar los días y los años sin que nada importante suceda. Los que nunca arriesgan nada son los primeros que se quejan de lo aburrida que es su vida. Esperan que el cambio, la felicidad, les llegue de fuera como una dádiva. Esta visión de las cosas no es muy productiva: encontrar un nuevo mundo requiere valor, optimismo e inmediatez. "Ahora o nunca" debería ser el lema. Si la puerta de Shambhala se ha abierto en tu vida, entra sin dudar. Es preferible errar cien veces que someterse a la rutina.

Cuatro factores que nos inmovilizan:

1. Duda permanente.
2. Miedo a agravar la situación.
3. La resignación.
4. La dependencia de opiniones de terceros.


Para saber más

* Anne & Daniel Meurois-Givaudan. Viaje a Shambhala. Luciérnaga, 1990.
* Chögyam Trunqpa. Shabhala. Kairós, 1999.
* Dino Buzzati. El desierto de los Tártaros. Debate, 1995.

...

Yo soy una amante de las historias de ficción y por tanto, de las películas que después están a la altura del relato original, tipo El Señor de los Anillos, Harry Potter, Avatar, etc. y todo lo que hable de magia, reinos escondidos en los que se encuentra una gran sabiduría y todos viven en paz y armonía, me chifla. Tal vez esto se deba a que me gustaría que a veces las cosas fueran tan "sencillas" y el bien y el mal estuvieran claramente diferenciados, nos pudieran salvar grandes y poderosos héroes y se supiera en todo momento, sin lugar a dudas, en qué lado está cada uno... Pero esta realidad es otra bien distinta y tal vez ese reino de armonía y paz exista, pero en nuestro interior... ¿alguna vez te imaginaste una aventura tan ardua?.

Indagando un poquito sobre Shambhala me he topado con las palabras del Dalai Lama y paso a exponerlas aquí:

Aunque los que tienen una afiliación especial puede realmente ir allí mediante su conexión kármica, sin embargo, [Shambala] no es un lugar físico que podamos encontrar en la realidad. Sólo puedo decir que es una tierra pura, una tierra pura dentro del ámbito humano. Y a menos que uno tenga el mérito y la asociación kármica real, uno no puede realmente llegar allí.
Tenzin Gyatso (1935–), durante una iniciación kalachakra en 1985 en la ciudad de Bodhgaya


¡Feliz Fin de Semana!.

Namaste.


Nota: Capítulo sacado del libro "99 maneras de ser FELIZ y 99 recetas budistas para vivir con plenitud" de Gottfried Kerstin.

2 comentarios:

  1. Justo ayer hablaba con Mr. X de la importancia de cumplir tus sueños. O al menos, intentarlo. ;)
    Muas!

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    Respuestas
    1. Hola Mo. Siento la tardanza en ver y contestar el comentario. Supongo que en vuestro caso hablamos de sueños dulces y de los que se disfrutan no sólo con el corazón, sino también con los sentidos. A por ello Amiga!!!!.

      Besotes!!!.

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