viernes, 28 de marzo de 2014

La viga en el ojo ajeno o la paja en el propio

Recuperándome poco a poco de virus y otros menesteres. Una espera que llegue el fin de semana con ilusión de descansar más, entre otras cosas y yo caigo enferma, si es que no puede ser. Menos mal que poco a poco todo pasa ;^).

¿Cómo lleváis la autocrítica?, vamos a ver qué dice sobre ello mi librito.

El buda de la autocrítica

"No mires las faltas de los 
demás o lo que los demás 
han hecho o dejado de hacer; 
observa lo que tú has hecho y 
has dejado de hacer".

Imagen de la página El Lanzallamas
en el artículo "Autocrítica: necesaria para todos..."

En su libro sobre el Dhammapada -resumen de las enseñanzas de Buda sobre disciplina mental y moral-, Thomas Cleary cita un famoso maestro zen que recomendaba a sus discípulos: "No montes el caballo de los demás, no dispares el arco de los demás, no te metas en los asuntos de los demás".

A no ser que lo hayan pedido expresamente, inmiscuirse en el territorio de otras personas es una actividad doblemente baldía, porque se realiza en un ámbito que no nos corresponde y nos desvía la atención del verdadero objetivo: el perfeccionamiento de uno mismo.

Hay que ser indulgente con los demás -y con uno mismo-, pero si no puedes librarte de tu espíritu crítico, en este caso lo mejor es que dirijas las primeras flechas a tu propia vida. Revisa tus actitudes, sopesa tus actos, valora el efecto de tus palabras. La autocrítica es el mejor remedio para olvidar la paja en el ojo ajeno.


Reinventa tu vida

Un pasaje del Corán reza: "Para Dios no cuenta lo que has sido, sino lo que serás a partir de ahora". Y tú, ¿qué quieres ser a partir de este momento?.

Es muy fácil hablar de qué haríamos si fueses éste o el otro, de que debería hacer tal o pascual... pero cada uno/a tiene sus circunstancias. Nadie puede hablar si no está plenamente metido en los zapatitos del otro y en el momento exacto, así que cualquier tipo de comentario siempre será gratuito.

Más valdría que para toda esa gente que suele hacerlo por costumbre, miraran un poquito para dentro y se analizaran ellos mismos. La autocrítica les haría crecer sin lugar a dudas y también les tendría... más entretenidos, jejeje.

No puedo evitar acordarme de mi clase de Yoga de ayer, en donde nuestra profesora decía "en el Yoga cada uno hace el suyo, aunque estemos en grupo, no se puede uno mirar y comparar con los demás, uno debe mirarse y escucharse a sí mismo". Más claro, agua.

Nota: Capítulo sacado del libro "99 maneras de ser FELIZ y 99 recetas budistas para vivir con plenitud" de Gottfried Kerstin.


3 comentarios:

  1. Estoy totalmente de acuerdo contigo suscribo cada una de tus palabras!!!

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  2. Hace tanto que no pasaba por tu budas....
    Pues decirte que es verdad. Que no vivimos la vida de otras personas así que difícilmente podremos adivinar que haríamos en su caso. Mejor centrarnos en comprenderlos.
    Saludos

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  3. Pues sí...y aunque lo sepamos a la perfección que fácil es a veces caer en la trampa!
    Buen finde!

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