Realidad y misterio

"Todo lo que una persona pueda 

imaginar, otras lograrán hacerlo 

realidad".

Jules Verne

Que nuestra realidad sea tediosa o un baúl de sorpresas depende en buena medida de los ojos con los que la percibimos. El aburrimiento es patrimonio de los aburridos y la aventura de los aventureros. Esto no implica que el que se aburre lo haga por decisión propia. Bajo la superficie de la insatisfacción a menudo se oculta el miedo a tomar iniciativas que nos hagan perder pie en nuestra rutina.

Imagen de la página Psique viva

Las personas que cuentan historias fascinantes suelen llevar una vida similar a la de los demás. La diferencia estriba en la habilidad de éstas para captar todo lo que la jornada ofrece de mágico y misterioso. A cada momento se producen coincidencias asombrosas o suceden hechos inexplicables o, al menos, curiosos. Si dejamos de lado nuestro escepticismo y nos dejamos llevar -con prudencia, por supuesto- por lo irracional, comprobaremos cómo nuestra atención se activa y un sentimiento optimista de juego se apodera de nosotros.

¿No jugabas de pequeño a descifrar misterios?. ¿Por qué no puedes hacer lo mismo ahora?. De vez en cuando, mirar el mundo desde otra perspectiva es estimulante y divertido. Esta visión lúdica de la realidad nos ayuda a desprendernos de nuestra carga de seriedad. Los adultos deberíamos ser niños con el valor añadido de la experiencia.

Piensa en todas las coincidencias inexplicables o hechos sorprendentes a los que has asistido en tu vida. Compártelos con otras personas; pueden ser un tema fascinante para una reunión nocturna. 


Para saber más 

* John Fowles. El mago. Anagrama, 1994.
* Lewis Carrol. Alicia en el país de las maravillas. Alianza, 1997.

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Si elimináramos el velo de la seriedad de nuestros ojos y volviéramos a ver el mundo como un niño, descubriríamos misterios, o más bien, haríamos de cualquier cosa un misterio por resolver... Esto me trae una sonrisa a la boca y me recuerda la etapa detectivesca de mi peque: un día, en el paseo con nuestro perro, se llevó una libretita y un lápiz y nos paramos infinidad de veces para que él dibujara y apuntara "pistas". Nos lo pasamos pipa, tanto él haciendo de detective, como yo viéndole hacer de cualquier cosa un hecho extraordinario y digno de observar y analizar.

En cuanto a las "coincidencias", muchos dicen que no existen... un tema interesante ciertamente. Os voy a contar una que me ha ocurrido esta mañana. Estaba realizando mi práctica diaria de yoga, y justo acabó la música en el momento justo en que terminaba y agradecía el momento de práctica, como si lo hubiera cronometrado. Ha sido muy "mágico".

¿Os apuntáis a los misterios?.

¡Feliz Fin de Semana!.

Namaste.


Nota: Capítulo sacado del libro "99 maneras de ser FELIZ y 99 recetas budistas para vivir con plenitud" de Gottfried Kerstin.